El acceso a financiación es clave para el desarrollo
de nuestros proyectos. Prueba de ello, es el éxito del sistema de micro
créditos aplicado en los países menos desarrollados, que permite a particulares
crear sus propios negocios y con los beneficios obtienen un salario y devuelven
de manera progresiva el crédito.
Los emprendedores son amantes al riesgo y muchos de
nosotros tenemos algún conocido que para crear una empresa, accede directamente
a una entidad bancaria, pide un préstamo por el importe que necesita y comienza
su aventura.
¿Es esto viable? La suerte lo dirá.
Y como nosotros no queremos depender de la suerte,
recomendamos el abc del empresario.
a.- Busca un nicho de mercado en el que no haya
competidores ni empresas consolidadas.
b.- Realiza un análisis coste-beneficio y estudia la
viabilidad del proyecto.
c.- Convierte tu idea en proyecto, es el paso previo a
la creación de la empresa.
Si tienes una idea y poco dinero para ponerla en marcha,
los mini préstamos son tu solución. Registrar un logotipo, una marca, una idea…
no es tan costoso como se nos vende.
Puedes pedir un mini préstamo de 300€, patentar tu
idea e intentar venderla a una empresa, o a partir de ahí crear una start up o
una empresa innovadora. Si fracasas, el importe lo devolverás en cómodos plazos
y no te ahogarás en deudas como cuando pides un préstamo grande.
La idea es ser empresario paso a paso, es decir, ir
trabajando sobre una idea y a partir de la misma ir consiguiendo financiación.
Si llegas con una presentación power point a posibles
inversores ni si quiera se molestarán en dedicar su recurso más valioso (su
tiempo) en escucharte. Pero si apareces con una patente, una marca registrada,
en definitiva una idea más tangible, te tomarán en serio y podrás comenzar la
aventura de ser empresario.
La idea consiste en arrancar con mini préstamos para
posteriormente no depender del sistema bancario en la financiación de nuestra
empresa, si no conseguir inversores particulares con los que podamos trabajar y
desarrollar el proyecto.
Con créditos rápidos como los de Cashper
puedes empezar a materializar tu idea, ya que con sus minipréstamos de hasta
500 euros podrás llegar a fin de mes o pagar alguna factura pendiente. Además,
es la única compañía del mercado en aceptar a clientes en Asnef. Otra opción la
dan los préstamos
urgentes de Pepedinero
con características parecidas a las de Cashper, pero sin aceptar clientes en
listas de morosidad pero con interesantes descuentos en tus créditos.
Recuerda, aunque los minicréditos no funcionan como
fuente de financiación recurrente, si puedes solicitarlos para comenzar con tu
proyecto con algo de liquidez. La posibilidad de recurrir a ellos como línea de
crédito abierta siempre es una interesante opción financiera. Te recomendamos
que busques la entidad que mejor se ajusta a tus necesidades y a tu perfil
crediticio para solicitar el préstamo ya que, actualmente, la oferta es muy
amplia y ofrece muchas posibilidades.
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